Un Punto Crucial de Interconexión
Chibiriquete puede sonar a un término extraño, distante y exótico. Pero en realidad, Chibiriquete está a solo un paso de distancia de cualquier colombiano. Este lugar, aparentemente lejano, es una joya cuya protección y cuidado son cruciales. Su descuido podría desencadenar una catástrofe sin precedentes en la historia del país y el continente. Muchos científicos reconocen a Chibiriquete como un punto de intersección e interdependencia entre la selva amazónica, los extensos llanos de la Orinoquia y las majestuosas zonas de la región andina. Y ahora mismo Chiribiquete es presa de la voraz deforestación.
Un Tesoro Natural y Cultural
En la actualidad, el Parque Nacional Natural Chibiriquete ocupa un área de casi dos millones 800 mil hectáreas, equivalentes a 28 mil kilómetros cuadrados, un territorio comparable en tamaño a naciones como Bélgica.
Pero la verdadera riqueza de Chibiriquete reside en su biodiversidad sin igual, sus formaciones rocosas y sus tepuyes imponentes. Es también un tesoro cultural, hogar de comunidades indígenas ancestrales como los Karijonas, quienes otorgan su nombre a esta vasta región, un corazón latente en la Amazonia.
La Historia Grabada en Piedra
Para los Karijonas, Chibiriquete es más que un nombre, es una descripción gráfica: “Cerro Que Dibuja Pintura”. La conclusión de algunos investigadores y antropólogos es que Chibiriquete fungía como un epicentro ceremonial para los pueblos originarios, cuya presencia en la zona se evidencia desde hace al menos 20 mil años a través de pinturas rupestres en las cuevas.
La Amenaza Inminente
Este mágico lugar es conocido como “La Capilla Sixtina” de la Amazonia, gracias a su legado arqueológico y pictórico dejado por la cultura Karijona. Pero, mientras se le rinde homenaje a su pasado, el presente y el futuro de Chibiriquete están en peligro.
Anuncios y Realidades Dolorosas
El presidente Juan Manuel Santos Calderón ha anunciado la expansión del área protegida, pasando de 28 mil a 43 mil kilómetros cuadrados. Sin embargo, esta noble intención se ve opacada por un incendio forestal tras otro, devorando la selva entre San José del Guaviare y el epicentro mismo de Chibiriquete.
Avance Implacable de la Deforestación
La deforestación avanza con voracidad en la región. El avance de la frontera agrícola es como un monstruo insaciable, devorando la tierra y dejando a su paso un desierto de tierra quemada. En Guaviare, los suelos son pobres y las posibilidades de explotación agrícola son limitadas. A diferencia de la Orinoquia, donde se pueden criar varias vacas por hectárea, aquí apenas sobreviven una o dos.
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Desafío en Todas las Frentes
Pero eso no detiene a quienes buscan beneficiarse sin pensar en las consecuencias. Cientos de hectáreas son arrasadas para acomodar un puñado de vacas, y la explotación maderera ilegal agrava la situación. El resultado es una pérdida alarmante de biodiversidad, un bosque convertido en cenizas y el aire lleno de contaminantes.
La Conexión Desastrosa
La ampliación de la frontera agrícola no es el único villano. La construcción de la vía 4G, la Marginal de la Selva, ha desencadenado una oleada destructiva. En cuestión de meses, miles de hectáreas han caído ante el avance de la maquinaria y la indiferencia.
Chiribiquete es presa de la voraz deforestación
El departamento de Guaviare, en su mayoría, es una reserva forestal. El 92% de su extensión está protegido por la ley. Sin embargo, ese pequeño 8% restante se convierte en un botín político y económico para quienes buscan sacar provecho rápido y despiadado.
El Vínculo con el Narcotráfico
El cultivo de drogas ilícitas también tiene su papel en esta tragedia ecológica. Pequeñas parcelas, a menudo no más grandes que unas pocas hectáreas, se convierten en campos de cultivo. La disidencia de las FARC y el Clan del Golfo se han adueñado de la región, propagando su destrucción sin temor.
Un Grito Ignorado
En un lugar donde la indignación debería ser el motor del cambio, la ineptitud del Estado es tan asombrosa como el desastre ambiental que está ocurriendo. Se prometen alternativas productivas, pero estas a menudo perpetúan el daño al medio ambiente. Ganadería desenfrenada, monocultivos sin miramientos y una red de carreteras que desgarra la naturaleza son la norma.
La Lucha por la Supervivencia
En contraste, la autoridad ambiental debería impulsar mercados verdes, ecoturismo y prácticas agrícolas sostenibles. Pero, lamentablemente, su poder se ve reducido ante el avance de fuerzas ilegales y la inacción de las instituciones.
El Lamento de Chibiriquete Presa de la Voraz Deforestación
Chiribiquete está siendo rodeado por la deforestación y la indiferencia. Un refugio de biodiversidad y cultura está siendo asediado por una voracidad insensata. Si las fuerzas destructivas siguen avanzando, la “Capilla Sixtina” de la Amazonia podría transformarse en un monumento a la ignorancia y la avaricia.
Periodista ambiental y de conservación colombiano, actualmente residente en Canadá.
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